El Premio Sasakawa de las Naciones Unidas para la Reducción de Desastres está dotado de unos 50.000 dólares que comparten el premiado y los ganadores de los Certifcados de Distinción y Mérito. Tiene una periodicidad bienal y se presenta durante la Plataforma Mundial para la Reducción del Riesgo de Desastres. La próxima ceremonia del Premio Sasakawa tendrá lugar durante la Plataforma Mundial que se reunirá en Ginebra (Suiza) entre el 8 y el 13 de mayo de 2011.2
Condiciones para optar al premio
El candidato puede ser una persona o una institución que haya desarrollado una acción destacada y reconocida internacionalmente que contribuya a los objetivos estratégicos y prioridades del Marco de Acción de Hyogo para 2005-2015: Aumento de la resiliencia de las naciones y las comunidades ante los desastres.
Los candidatos deben ser capaces de demostrar cómo se relacionan sus logros con la campaña internacional más reciente sobre reducción del riesgo de desastres, Ciudades resilientes: preparémonos para los desastres, apoyándose en el máximo número posible de los 10 Aspectos Básicos para abordar cuestiones de gobernanza local y riesgo urbano.
Lista de comprobación de los 10 aspectos básicos de las ciudades resilientes
Definir la organización y coordinación para clarifcar las funciones y responsabilidades de todos los implicados.
Asignar un presupuesto y ofrecer incentivos a los propietarios de viviendas, las familias de bajos ingresos y el sector privado para que inviertan en la reducción del riesgo.
Actualizar los datos sobre amenazas y vulnerabilidades; elaborar y compartir las evaluaciones de riesgos.
Invertir y mantener las infraestructuras críticas, como el drenaje en caso de tormenta.
Evaluar la seguridad de todas las escuelas e instalaciones de salud y mejorarlas según convenga.
Hacer cumplir los reglamentos de construcción y los principios de planifcación territorial acordes con los riesgos; identifcar terrenos seguros para los ciudadanos de ingresos bajos.
Garantizar que existen programas educativos y de formación en materia de reducción del riesgo de desastres en las escuelas y las comunidades locales.
Proteger los ecosistemas y las barreras naturales para mitigar las amenazas; adaptarse al cambio climático.
Instalar sistemas de alerta temprana y disponer de la capacidad de gestión de emergencias.
Después de cualquier desastre, asegurarse de que las necesidades de la población afectada constituyen el eje de la reconstrucción. Acceda a:www.unisdr.org/campaign
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